Dicen que no es bien nacido el que no es agradecido, y si eso se cumple, yo no puedo dejar de agradecerlo al que algo me ha enseñado en mi vida, en mi trabajo, en mi inteligencia sentimental, en como dirían en mi pueblo, si, ese (puto poblet) que reza en una pintada que yo todavía no he visto, pero que parece el eslogan que le corresponde (a buen entendedor...) "a tot el que m'ha ensenyat un porró de coses."
Amigos y enemigos que han hecho ser la que soy, pero hoy especialmente al que ha dejado de ser un conocido para ser un amigo, Antonio Vélez Celemín, un artista al que nunca estaré lo suficientemente agradecida por compartir sus conocimientos en este mundo de la encuadernación en el que algunos maestros guardan su arte "por si la competencia".
Como dice él :"Cuanto más se divulgue la técnica tendremos más posibilidades de sorprendernos y de disfrutar con la imaginación y la creatividad de todos."
Os dejo un vídeo y os conmino a que lo veáis, entonces entenderéis porqué alguien se enamora de una técnica.
5 comentarios:
genial!
Gloria pues vayamos sin tardar a visitar a Celemín.. pero antes de eso vuelvo a repetir lo bien que se ve este blog y lo hermoso que trabajas. Un abrazo y buena vibra
Una técnica muy hermosa. Me han dado ganas de estar allí, en el taller, experimentado con las formas y colores. Un abrazo, gracias por tus palabras.
Ahhh
genial, genial.
un abrazo
Techne.... base primigenia para plasmar inspiracion
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