viernes, 5 de diciembre de 2008

Anatomía de un plomo para Àngels

Tipografía Rótulo fina cuerpo del 24.

Tipo (Del lat. typus, y éste del gr. τúπος).


Término que refiere a un modelo o carácter grabado empleado en el arte de la imprenta. Cada uno de los tipos fundidos o bloques que tienen grabado en una de sus caras, y en relieve, una letra o signo tipográfico. Los tipos de plomo pueden contener caracteres de caja alta, de caja baja, números (alineados y no alineados), versalitas, ligaduras, florituras, ornamentos, signos de puntuación, espacios, etc.




Las partes más importantes de un tipo de plomo son:



Altura: o distancia desde la base hasta la superficie del ojo. La altura es la única dimensión rigurosamente igual para todos los tipos de cualquier cuerpo y estilo.

Árbol: o distancia entre la base y el hombro o rebaba, donde empieza el talud que soporta el relieve del ojo.

Cran: hendidura, ranura o estría que presenta el tipo en una de sus caras -la anterior o la posterior- para facilitar su rápida colocación en el componedor. Sirve, además, para distinguir entre los caracteres de un mismo cuerpo los que son de distinta familia. A veces el tipo puede tener 2 o más cranes.

Cuerpo: distancia entre la cara anterior y posterior del tipo; esta distancia que determina los distintos cuerpos o tamaños, se mide por puntos tipográficos y es igual en todos los tipos de una misma caja y del mismo cuerpo.

Espesor o Grueso: distancia que media entre las caras laterales del tipo y que se adapta a las distintas anchuras de los caracteres. Esto significa que aunque los caracteres de una misma caja son todos de un mismo cuerpo, no todos tendrán igual grueso; puesto que la m será siempre más ancha que la l; la b más ancha que la i, etc.

Ojo: relieve que tiene el tipo en su cara superior para producir la impresión.

Pie o Base: parte inferior del tipo opuesta al ojo, en el que suele haber una hendidura o canal producida por el molde de fundición.

Rebaba u Hombro: espacio que media entre los bordes del prisma -incluído el talud- y la superficie del ojo. La rebaba es mayor, evidentemente, por la parte superior e inferior que por los lados; por arriba y por abajo se desarrollan los caracteres con ascendentes y/o descendentes, y por los lados el espacio o acercamiento ha de ser el mínimo y en relación con el del caracter contiguo. Este espacio permite que en la impresión queden las letras separadas de manera adecuada, impidiendo que los caracteres se monten unos sobre otros. Cada carácter tiene su propia medida espacial, para lograr una correcta relación con los pares formados (o kerning).
fuente:
typographie & civilisation .


4 comentarios:

Àngels dijo...

Gràcies... ja ho he entés.

Vicente Molina dijo...

¿cuantos blogs tienes? creo que cada vez posteo en uno diferente :)

Sótano dijo...

Personalidad múltiple que se llama, ;)

Erne dijo...

jaaaaaa
ya estoy devuelta.

Recuerdo una canción de Serrat que decía
no es que no vuelva porque me he olvidado, es que perdí el camino de regreso.

Y que sepas que aun no he entrado a ver como va mi blog y ya estoy en el tuyo.
Voy a ojear un rato este sotano maravilloso.